Persona firmando contrato delante de un ordenador

¿Es obligatorio contratar un seguro de vida si accedo a un préstamo personal?

No es obligatorio contratar un seguro de vida cuando accedes a un préstamo personal. No obstante, puede ser recomendable hacerlo, ya que desde el seguro se encargan de que tus deudas queden saldadas si te ocurre algo. Y, además, el precio de las pólizas no suele ser muy elevado, pues las cantidades que habitualmente se solicitan cuando se accede a un préstamo personal apenas lo son (comparadas con, por ejemplo, los préstamos hipotecarios).

Si estás interesado en solicitar un préstamo personal, y has buscado información al respecto, es probable que te estés preguntando si es obligatorio, o no, contratar un seguro de vida asociado a dicho préstamo personal. La respuesta es no.

No obstante, antes de precipitarse, es recomendable conocer exactamente qué implica contratar un seguro de vida personal, las ventajas y desventajas de hacerlo o lo establecido por la ley. De esta forma, te resultará más sencillo acceder al mejor préstamo personal, de acuerdo a tus necesidades económicas y de financiación.

¿Es obligatorio contratar un seguro de vida?

Por Ley, las personas que acceden a un préstamo personal no están obligadas a contratar un seguro de vida. No obstante, aunque los bancos no puedan obligarte a contratarlos, sí está permitido que te rebajen o mejoren las condiciones del préstamo (como reducir los intereses) si contratas el seguro.

De esta forma, las entidades bancarias consiguen incrementar las ventas de los seguros que tienen entre sus productos y, adicionalmente, te conceden el préstamo.

Y te preguntarás: ¿Es legal hacer esto? A día de hoy, sí lo es. La verdad es que se trata de un procedimiento bastante similar a cuando la entidad te regala un artículo a cambio de domiciliar tu nómina con ellos.

¿Y si no contrato un seguro de vida con el préstamo personal?

Ya hemos explicado cómo contratar un seguro de vida puede resultar en unas mejores condiciones. No obstante, ¿qué ocurriría si, después de hacer cálculos, descubrimos que no nos interesa contratar el seguro de vida a cambio de la rebaja en el tipo de interés? En tal caso, conviene rechazar la contratación del seguro de vida.

No obstante, ¿qué consecuencias puede tener? Los dos efectos más probables son:

1.      Que aumente el tipo de interés del préstamo

Como ya hemos explicado, ninguna entidad bancaria puede obligarte a contratar un seguro de vida asociado al préstamo personal. No obstante, sí pueden ofrecerte unas mejores condiciones si lo haces. O, viéndolo desde la perspectiva contraria, aumentarte el interés del préstamo si no contratas el seguro de vida.

Algo parecido ocurre con las hipotecas: las principales entidades comercializan lo que se denomina Préstamo Bonificado. En los Préstamos Bonificados los intereses son considerablemente inferiores. Sin embargo, solo está disponible para quienes adquieren otros productos adicionales, como puede ser un seguro de vida o de protección de pagos.

En definitiva, si no contratas el producto asociado, el tipo de interés será mayor. No obstante, ha de ser el cliente quien determine si le interesa, o no, llevar a cabo esta operación. Todo dependerá de tu situación económica y necesidades personales. A muchas personas les resulta una operación altamente beneficiosa, mientras que otras se encuentran en la situación opuesta.

Eso sí, recuerda que existen muchas entidades que ofrecen préstamos personales, más allá de tu entidad bancaria. Si lo deseas, puedes acceder a nuestro comparador de préstamos y encontrar un listado de las mejores ofertas de financiación (de acuerdo al dinero que desees solicitar, plazos y demás condiciones).

2.      Que el banco no te conceda el préstamo

Los bancos no pueden obligarte a contratar el seguro. No obstante, en el peor de los casos, sí pueden decidir no concederte el préstamo. Esto ocurre cuando el departamento de análisis considera que no eres un cliente solvente, lo que implica que la devolución del préstamo no está garantizada.

En estos casos, tienes las siguientes alternativas:

  • Contratar el préstamo aportando un aval.
  • Contratar el préstamo junto con el seguro de vida.
  • No acceder a financiación (lo que muchas veces no es una alternativa).
  • Buscar otras formas de financiación.

Esta última alternativa es considerablemente sencilla. Pues, como ya hemos señalado, en nuestro comparador de préstamos encontrarás multitud de alternativas de financiación (desde préstamos personales hasta microcréditos).

Entonces, ¿puedo acceder a un préstamo personal sin aval o seguro de vida?

Todo dependerá de tu solvencia y la entidad financiera a la que decidas acceder. No obstante, sí puedes contratar un préstamo personal sin aval o seguro de vida. De hecho, a los bancos tradicionales les suele parecer suficiente que domicilies tu nómina con ellos. Entre otras cosas, porque les permite asegurarse de tu solvencia para la devolución del préstamo.

También facilita el acceso a un préstamo tener un historial crediticio favorable con el banco, lo que siempre suma puntos que para que estos acepten concederte financiación.

Conclusión: seguros de vida en los préstamos personales

En definitiva, lo más importante a la hora de solicitar un préstamo personal es que la entidad bancaria valore de forma positiva tu solvencia al realizar el estudio. En otras palabras, que tu situación laboral sea el único aval que necesites.

De esta forma, no te verás en la tesitura de contratar productos adicionales, bien sea un seguro de vida o un seguro de protección. Y, por supuesto, nunca solicites una cantidad superior a la que necesitas y vas a poder devolver.