La compraventa de vehículos se desplomó en España con la aparición de la crisis económica, y desde entonces, el sector automovilístico no ha dejado de reinventarse. Constantemente aparecen nuevas ofertas, promociones, descuentos, formas más flexibles de financiación o, en este caso, el leasing, que no es otra cosa que un alquiler con opción a compra.
Y todo ello con el objetivo de evitar que las miradas de los compradores se centren en la incertidumbre que existe en torno al impuesto al diésel o las nuevas limitaciones a la movilidad, especialmente en estos últimos meses en los que la pandemia ha dificultado aún más si cabe la complejidad del sector automovilístico.
Por estos motivos, es fundamental conocer en profundidad qué es el leasing, sus características, ventajas y desventajas. Y lo mismo con la opción de solicitar un préstamo para adquirir un vehículo. Todo ello, para tomar la mejor decisión de acuerdo a las necesidades personales y financieras de cada persona. Desde Comparazona, te explicamos todo aquello que debes conocer, a continuación:
Todo lo que debes saber acerca del leasing
El leasing (o arrendamiento financiero) es un contrato de alquiler con opción a compra, por lo que el arrendatario puede ejercer dicha opción al finalizar el contrato. Además, esta opción permite renovar el contrato o alquilar otro vehículo, aunque por supuesto esto puede variar de unas entidades a otras.
En caso de comprar un vehículo a través de leasing el arrendatario debe pagar unas cuotas mensuales ligeramente más bajas a las que se paga en los préstamos personales. Sin embargo, al momento del vencimiento, en caso de adquirir dicho vehículo se debe pagar la totalidad de este. Ahora bien, su valor residual es muy inferior en comparación a su valor inicial.
Por otro lado, dentro del leasing encontramos dos alternativas:
- Leasing cerrado: cuando puedes devolver el vehículo al finalizar el contrato. Eso sí, deberás tener cuidado con no sobrepasar los kilómetros permitidos o desgastar el vehículo en exceso, ya que en tales casos deberás pagar una indemnización.
- Leasing abierto: cuando tienes la obligación de comprar el vehículo al finalizar el contrato.
También es importante que sepas que, si alquilas un coche a través de leasing, este estará a tu nombre, por lo que es responsabilidad tuya. Esto supone hacer frente a los diferentes gastos que debas afrontar. Y aquí la principal diferencia entre leasing y renting. En este último caso, asumes una cuota fija y una fianza para utilizar el coche. Sin embargo, no tienes la opción a compra que sí se ofrece en el leasing.
Características del leasing
Cuando utilizas la opción leasing para comprar un coche, realmente es un tercero quien está efectuando dicha adquisición, con la condición de que el comprador devuelva el dinero a plazos. Este tercero suele ser una entidad de leasing o banco, y como puedes comprobar, esta alternativa no se diferencia en exceso a los préstamos personales. Aunque en el leasing cerrado repetimos que puedes no ejercer la opción de compra.
Otra característica es que la duración mínima del contrato es de dos años, tras lo cual deberás tomar la decisión de qué hacer con el vehículo.
En tercer lugar, y como ya hemos señalado, en el contrato aparece el número máximo de kilómetros que podemos hacer a lo largo del año, así como el estado de desgaste que deberá mantener este al finalizar el contrato. Si se sobrepasan dichos kilómetros o desgaste establecido, se debe pagar una indemnización.
Ventajas del leasing
El leasing es una alternativa muy interesante que desde luego puede ser beneficiosa para muchas personas, aunque hay varios aspectos negativos que también debes considerar. Como ventajas, destacan las siguientes:
- Posibilidad de renovar tu coche cada dos años: el leasing te permite renovar tu vehículo cada dos años, pudiendo escoger una categoría superior con cada contrato, siempre que no termines comprando el vehículo, claro.
- Cuotas asumibles: el leasing también destaca por ofrecer una mayor flexibilidad a la ofrecida por los préstamos tradicionales, ya que los pagos mensuales son inferiores.
- Desembolso inicial menor: apenas existen gastos iniciales que encarezcan el leasing más allá de las cuotas mensuales. Eso sí, es posible que debas abonar una fianza, dependiendo de la oferta.
- Ventajas fiscales asociadas a empresas y autónomos: además, existen ventajas fiscales para quienes adquieran el vehículo para ejercer actividades profesionales, ya que puedes desgravarte el Impuesto de Sociedades o IRPF.
Desventajas del leasing
Como señalamos, existen varias desventajas por las que en muchas ocasiones no interesa esta opción:
- Pago de cuotas por un vehículo que no se encuentra bajo tu posesión: al igual que ocurre con quienes alquilan una vivienda, si decides no adquirir el coche al finalizar el contrato, estarás pagando cuotas por un bien que no está bajo tu posesión.
- Penalización por cancelación: al igual que ocurre con cualquier otro contrato, en caso de cancelación de este antes de su fecha de vencimiento, se deben pagar un determinado coste.
- Contratación de un seguro: recuerda que el vehículo está a tu nombre, por lo que deberás contratar un seguro de coche para garantizar su mantenimiento. Además, dado que se trata de un alquiler, posiblemente debas pagar un importe superior.
- Otros costes: como señalamos, en caso de superar el máximo de kilómetros permitidos o desgastar en exceso el vehículo, debes pagar una indemnización. Además, los gastos asociados a reparaciones u otros deberá realizarlos el propio arrendatario.
Por supuesto, conviene valorar tanto las ventajas como las desventajas. Y, si decides que el leasing no es la mejor alternativa en tu caso, no te preocupes. Existen otras formas para comprar un coche y no pagarlo al contado, como los préstamos personales, otra de las opciones más valoradas.
En este caso, aso sí, es fundamental comparar detenidamente entre las diferentes ofertas del mercado, de forma que puedas encontrar aquella que mejor se adapte a tus necesidades personales y financiera. Para hacerlo, puedes visitar nuestro comparador de préstamos e introducir la cantidad que necesitas y el plazo de vencimiento.